En las películas de los Piratas del Caribe el Capitán Jack Sparrow tenía una brújula que no señalaba hacia el norte y los que no la conocían creían que estaba rota. La brújula, sin embargo, era un artefacto valiosísimo ya que señalaba lo que uno realmente desea. Así que cuando lo que Jack más desea es encontrar su barco solo tiene que mirar la brújula y ¡bum! Ya sabe en que dirección moverse. Si lo que realmente desea es encontrar un tesoro, igual: ¡bum! La brújula le dice hacia dónde ir. El problema real lo encuentra el protagonista cuando no sabe que es lo que realmente desea, cuando no sabe si salvar a su amada o ir tras un tesoro. En ese momento la brújula no lo puede ayudar.
Hoy siento que me pasaría lo mismo si tuviese esa brújula: simplemente daría vueltas sin detenerse en ninguna dirección. Esto porque no estoy seguro de qué es lo que realmente deseo. En otras palabras, estoy en búsqueda de mi propósito, y hasta que no lo sepa, ninguna brújula me puede ayudar. Déjame expandir: estoy en una etapa de transición en mi vida: completé mis estudios formales hace varios años, mi hija ya es mayor de edad, mis perros son viejos, completé 16 años en mi trabajo. Eso significa que ahora tengo el tiempo y los recursos para hacer cosas para mí. Puedo distribuir mi tiempo entre pasatiempos, proyectos que generen ingreso adicional, compartir con amistades, lo que quiera. Y ahí es donde está la dificultad: ¿qué es lo que quiero?
Ya lo dije antes: lo quiero todo y ahora. Pero ya he vivido suficiente para saber que puedo hacer solamente una cosa a la vez, si quiero hacerla bien. Entonces, la pregunta nuevamente: ¿qué es lo que realmente quiero hacer? Disfruto de mi trabajo y quiero seguir haciendo lo que hago: enseñar, gerenciar proyectos de servicio y supervisar investigación graduada. También disfruto de mi vida independiente y de mis amistades. Sin embargo, siento que tengo recursos para hacer algo más, pero no me decido a qué. Así que la brújula de Jack Sparrow no me va a servir de mucho.
¿Qué puedo hacer? Por ahora se me ocurren dos estrategias. Primero, repasar y reflexionar sobre mi pasado para identificar los momentos, actividades, proyectos que más satisfacción me han dado y que más he disfrutado. Ahí claramente puedo ver que los momentos más felices y satisfactorios de mi vida se han dado rodeado de otras personas, trabajando con otros y para el beneficio de muchos. Esa es mi primera clave. La segunda estrategia es explorar: hacer varias cosas y reflexionar sobre el proceso, sobre lo que disfruto y lo que no, lo que me hace sentir productivo, valioso, y lo que no. Ahí nuevamente veo que disfruto mucho más de proyectos y actividades que hago en colaboración con otros, que disfruto del movimiento, de la actividad física y de pasar tiempo afuera de la oficina. Esa es mi segunda clave.
Aún no tengo la respuesta final a qué es lo que realmente deseo en este momento, pero creo que me voy acercando. Espero pronto poder tomar la brújula de Jack Sparrow y dirigirme confiado hacia donde me señale. Mientras tanto, estoy seguro de que en ese camino estaré acompañado, rodeado de gente que quiero y que me quiere, aportando juntos cosas valiosas para los demás, disfrutando de mi neurodiversidad (TDAH o ADHD) y tratando de no fastidiar a los que están a mi alrededor.
Como siempre, te seguiré contando. Cuídate.
